El 30 de agosto de 2006, Cristian y dos amigos pescaban a orillas del río Quilquihue. Un lugar que debería ser de libre acceso. Desde las cabañas "Andina" le dispararon varios tiros aduciendo que los pescadores estaban en "propiedad privada". Ante el pedido de explicaciones por parte de Cristian, el guardia privado Horacio Calderón lo asesinó de un tiro en el cuello.
Desde entonces, su familia y sus amigos reclaman justicia. Calderón fue condenado a 13 años de prisión efectiva; pero quien lo contrató y lo armó, el empresario Gaspar Schoro, dueño de las cabañas y de los alambrados ilegales sobre el río, nunca se sentó en el banquillo de los acusados, a pesar de que el arma no estaba declarada.
Angel, el papá, Mirta, la mamá, y sus hermanos, hijos y amigos, con increíble fortaleza, transformaron el dolor en lucha, y crearon la Asociación Cristian González, por el libre acceso a las costas de ríos y lagos patagónicos.
Invitado por ellos, asistí por segunda vez, a pintar, en este caso, una bandera-mural, en el marco de las actividades por el recordatorio del asesinato de Cristian.
Los eventos se realizaron del 27 al 29 de agosto en San Martín de los Andes, bajo una intensa nevada. Agradezco a cada uno de los integrantes de la Asociación por la excelente atención que tuvimos todos los invitados.
Como anécdota del caso, debo decir que yo me fui con mis dos pares de zapatillas Topper de lona. Mirando esta imagen te darás cuenta de cómo me recagué de frío en las patas.
En fin.
No soy muy amante de la nieve.
Buenas Noches.
LA MAGIA DEL DIBUJO
Hace 1 hora